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La particular sanación del Emperador

"El emperador estaba enfermo y los médicos imperiales no podían curarlo.

Aunque los cocineros le preparaban los platos más exquisitos el emperador nunca tenía apetito.

Hasta que un día un médico famoso, que tiempo atrás se había negado a trabajar para el emperador para poder atender al pueblo, le ofreció sus servicios.

 

-Me alegro de que por fin hayas decidido servir en palacio-dijo el Emperador

-Será mi última oportunidad, pero suplico a su majestad me conceda un deseo- respondió el médico

-Mil deseos te concederé si me curas de mi dolencia

-Uno solo basta majestad y quedaréis curado de vuestra dolencia ¿me permitiréis pasear libremente por vuestro palacio?

-Por supuesto - respondió el emperador

 

Cuando el emperador fue a buscar a su concubina favorita, encontró al médico intentanto acostarse con ella.

 

-¡Lleváoslo de aquí y cortadle la cabeza! - gritó el emperador con una furia incontrolable

¡Y así el emperador se curó!

 

Su pérdida de apetito se debía a un exceso de preocupación. La preocupación corresponde al elemento tierra, lo que domina la tierra es el elemento madera y la emoción correspondiente es la ira. El ciclo de interdestructividad puede ayudar a equilibrar una emoción.

El miedo vence a la alegría; la alegría vence a la tristeza; la tristeza vence a la ira; la ira vence a la preocupación; la preocupación vence al miedo."

 

Wong Kiew Kit

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